Hola, somos la Familia Morales: Juan Ángel, Beatriz, Nadia y Mónica.
En años anteriores iniciamos con las Misiones como pareja de Encuentros Conyugales, y nuestras hijas supieron de nuestra experiencia y eso las entusiasmo. A pesar que nuestra hija menor aún tiene 12 años, ella quiso acompañarnos y obtuvimos el apoyo y autorización del Padre Jaime. Así que fuimos Completos! Y ha sido para nosotros como familia una gran Bendición.
En las casas que nos abrieron notamos en algunas la ausencia de Dios y en otras la Bendición que es seguir al Señor y cómo ha bendecido a sus hogares. Nuestra hija mayor tuvo la oportunidad de abrir la puerta de una familia muy necesitada en la que el pecado las ha destruido mucho.
Así que como familia satisfechos de haber cumplido con la misión de Jesús de evangelizar, y de mostrarnos el amor y la misericordia que nosotros podemos recibir si seguimos los pasos del Señor.
Lo que nos motivó a Misionar fue hacer vida lo que Jesús nos pidió, que es promulgar el Evangelio, a todas las personas sean necesitadas o no de la palabra. Fue una experiencia muy valiosa en donde pudimos no solamente ganar nosotros aprendiendo de las personas que visitábamos, sino que también llevar una semilla que solamente Dios sabe en que momento germinaría. Con nuestras hijas fue una doble Bendición tal como Nadia lo ha expresado.
Nadia: En lo personal esta fue la primera vez que misionaba, entonces estaba un poco nerviosa. Sin embargo, a lo largo de todas las visitas siento que aprendí mucho, siento que Dios me abrió los ojos. Tuve la oportunidad de ver lo que resulta cuando uno se aleja de Dios y realmente es algo muy triste, entonces eso me motiva a poder seguir siempre en su camino.
Mónica: en mi caso que soy la más chiquita estoy bastante involucrada en el movimiento de la Infanto Juvenil que son los jueves. Allí siempre me hablan de Dios, pero cuando mi mami me dijo que quizá yo podría misionar me encantó la idea de que quizá yo iba a poder hacer lo mismo que hizo Jesús, que en algún momento fue evangelizar. A Él lo escupieron, lo rechazaron, no le abrieron, o algunos le abrieron y lo acogieron. Entonces me encantó la idea de que quizá yo podría experimentar un pedazo de lo que Él pudo hacer.
Los invitamos a unirse como familia, entusiasmarlos para que el próximo año no tengan miedo, y cumplamos lo que Jesús nos dijo, Vengan y Verán!
Comments